Hace unos meses fui por primera vez al restaurante The Spotted Pig de April Bloomfield en NYC, gracias a la recomendación de Jorge, amigo ex new yorkino. Roberto me complació, como siempre, y fuimos a comer las hamburguesas con queso roquefort y unas papitas fritas que saben a gloria.

El lugar es una belleza, lleno de maticas y cochinos por todos lados. Tiene un ambiente de pub, oscuro, informal, lleno de gente, que lo hace muy interesante. Lo primero que hicimos fue pedir la cerveza de la casa y las hamburguesas. Así que atorada como soy, después de darle el primer mordisco a mi hamburguesa, supe que necesitaba el libro de esta chef. ¡Estaba encantada con ese lugar!

Llevo un tiempo saboreando las recetas de A Girl and her pig. En la sección de los postres, encontré una receta llamada Eton Mess (versión inglesa de nuestro merengón de fresas) que me llamó la atención. A diferencia  de nuestro merengón,  ellos lo mezclan todo y hacen un desorden con los supiros, la crema y las fresas. Yo lo hice por capas, me gusta más que se vea “ordenado” el postre.

Si tienes a oportunidad de probar The Spotted Pig y te hacen esperar (muy probable) disfruta la espera en el lindo banquito de afuera rodeado de matas.

Merengón de Fresas

Necesitas

3 claras de huevo

½ taza de azúcar pulverizada

1 cucharadita de ralladura de limón

1 taza de crema de leche para batir

1 ½  cucharadita de azúcar pulverizada

½ vainilla cortada por la mitad

4 tazas de fresas lavadas y cortadas por la mitad

3 cucharadas de vodka

1 cucharada de ralladura de limón

2 cucharadas de jugo de limón

2 cucharaditas de un buen vinagre balsámico

1 pizca de sal

1 pizca de pimienta negra molida

1 a 2 cucharadas de azúcar

Vainilla al gusto

Preparación

Comienza con los suspiros. Precalienta el horno a 400F y prepara una bandeja para hornear con papel encerado.

En una olla mediana, agrega dos dedos de agua y ponla a hervir.  En un bowl aparte mezcla las claras de huevo y el azúcar. Una vez que el agua hierva, apaga la cocina y coloca sobre la olla el bowl con las claras. El bowl no debe tocar el agua.  Revuelve constantemente hasta disolver el azúcar y obtener una mezcla blanca y homogénea. A mi me tomó 5 minutos aproximadamente.

Pasa la mezcla de claras a la batidora y mezcla a máxima velocidad hasta que las claras levanten y se formen picos. Agrega de forma envolvente la ralladura de limón. La mezcla queda lisa y brillante.

Otra forma más sencilla de hacer los suspiros es siguiendo la receta que publiqué hace unos meses en mi cuenta de Instagram.

Forma los suspiros sobre las bandejas para hornear, cuidando dejar espacio entre ellos porque van a crecer en el horno. Cuando el horno llegue a los 400F, mete la bandeja y paga el horno. Estarán listos cuando el horno se enfríe.

Para hacer la crema batida, combina la crema de leche y el azúcar en un bowl y agrega la vainilla. Mezcla con la batidora hasta levantar el pico. Refrigerar hasta el momento del montaje.

Por último prepara las fresas. En un bowl, mezcla las fresas con la vodka, la ralladura de limón, el jugo de limón, el vinagre balsámico, la sal y pimienta, vainilla y azúcar. Refrigera por al menos 30 minutos.

Para montar, puedes mezclar todo junto y revolver, para lograr el Eton Mess, o en un recipiente de vidrio formar capas de crema batida, fresas y suspiros.

Mientras mas frescas y bonitas estén las fresas, más rico quedará el postre. Yo conseguí las mías ayer en la frutería Santa Barbara en Las Mercedes.

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