Cocinar con los niños: Promover el desarrollo y el aprendizaje desde la cocina.
En la cocina podemos ofrecer a los niños la oportunidad de desarrollar su autonomía y estimular la confianza en sus habilidades. Gracias a actividades sencillas como sumar, leer y seguir pasos e instrucciones, los niños no solo fortalecen su autoestima, sino que se vuelven más independientes.
Cuando cocino con mis niñitos trato de tener presente las bases del método Montessori. Lo primero es confiar en que los niños nos pueden ayudar a cocinar y mostrar respeto cuando intentan ayudar ejerciendo su independencia. Permíteles que se sientan útiles e importantes.
La organización es fundamental, siempre procuro preparar el espacio de trabajo con los utensilios que van a utilizar. Tomando en cuenta que sean objetos que ellos puedan manipular solos, por ejemplo, utilizando tazas de medir y cucharas de plástico, bowls que no se rompan, cucharas pequeñas, entre otros. Cuando están más grandes y pueden cortar, hay cuchillos pequeños que ellos pueden manipular sin riesgos. Mientras tanto, es mejor no tenerlos a la vista para evitar la tentación que lleve al conflicto.
Parte de la organización previa también incluye escoger el momento ideal, por ejemplo, una tarde en la cual no tienen más actividades y no hay apuro. También, escoger una receta apropiada. Para niños chiquitos deben ser platos sencillos en donde ellos tengan que seguir 5 pasos o menos.
Antes de comenzar es importante definir las reglas: que se puede tocar y que no, cuales son las tareas para los niños y cuáles para los adultos. Luego se les puede explicar o demonstrar cómo se hace algún procedimiento y finalmente se les da la libertad de que ellos lo hagan solos. Tu rol debe ser dar apoyo, para guiar y ayudar si hace falta.
Como mis niños están pequeños todavía, nuestra receta favorita para preparar juntos son estas galletas de mantequilla.